Drop.io es un servicio online para compartir contenido. Su utilización es sencilla, el usuario únicamente debe de crear un «drop» y a continuación ya puede compartir el contenido que desee, como por ejemplo documentos, vídeos o música. Además, el usuario puede decidir la duración de operatividad del «drop», decidir quien puede ver el contenido, establecer permisos para que puedan alterar el contenido y compartir el contenido en una variedad de maneras, incluyendo en Facebook.
Este servicio es muy ventajoso para los usuarios, sobre todo porque pueden ver los contenidos agregados en tiempo real, sin la necesidad de tener que actualizar el navegador web. Pero ahora que Facebook lo ha comprado, las ventajas pueden ser radicales. Por el momento, el equipo de Drop.io ha comunicado que a partir de esta semana, los usuarios no podrán crear «drops» gratuitos, y los de pago estarán activos hasta el día 15 de diciembre. A partir de ese día, todo los datos de los usuarios serán eliminados.
Facebook dijo que podían confirmar que han completado recientemente la adquisición de la mayor parte de activos de Drop.io, y que están encantados de que Sam Lessin, fundador de Drop.io, se uniera a Facebook. Pero que casualidad que Lessin es ex-alumno de Harvard y amigo de Mark Zuckerberg.