Sin duda alguna el sistema de captación de movimientos de Microsoft, llamado Kinect, que funciona en conjunto con su consola de sobremesa Xbox 360, es una maravilla para la cual han nacido una serie de vídeojuegos muy divertidos que hacen uso de esta capacidad de jugar sin mando de control, otorgando horas de diversión y hasta cansancio a los jugadores.
Pero Kinect no está limitado a solo dar horas de juegos a sus usuarios, sino que gracias a unos laboratorios de investigación que han nacido en la gigante de Redmond, además de grupos independientes, se le han conseguido inclusive usos médicos para este sistema, por lo que las posibilidades de Kinect parecen ser casi ilimitadas.
Es así como un informático de la EureCom, una escuela de ingeniería en computación de Francia, ha desarrollado un sistema en conjunto con otros colegas que permite a través de Kinect medir el peso de astronautas en condiciones de escasa gravedad.
Esto es posible al utilizar Kinect en conjunto con una base de datos con las medidas corporales de 28.000 personas por lo que al estimar el volumen del usuario y contrastarlo con la información con la que cuenta le permite realizar estimaciones de peso, por lo que este sistema podría instalarse y utilizarse hasta dentro de una estación espacial. Los límites de Kinect son cada vez menores.