Si eres nuevo en el mundo de las criptomonedas, sin dudas has descubierto que hay una gran cantidad de jerga y terminología técnica para tratar de entender. Dos términos que pueden ser fuente de mucha confusión son «criptomonedas» y «token». Ambas palabras se pueden usar para describir unidades de valor de blockchain y hay muchas similitudes entre las dos. Sin embargo, también hay algunas diferencias importantes.
Criptomonedas vs Tokens
Las criptomonedas son unidades independientes basadas en su propia cadena de bloques. Los tokens se crean y alojan en blockchains existentes.
Esta información no debe interpretarse como un endoso de criptomoneda o cualquier proveedor, servicio u oferta específicos. No es una recomendación para comerciar. Las criptomonedas son especulativas, complejas e implican riesgos significativos. Son altamente volátiles y sensibles a la actividad secundaria.
Son impredecibles y el rendimiento pasado no garantiza el valor futuro. Considera tus propias circunstancias y obtén tu propio consejo antes de confiar en esta información. También debes verificar la naturaleza de cualquier producto o servicio. Incluidos su estado legal y los requisitos reglamentarios pertinentes. Es preciso consultar los sitios web de los reguladores pertinentes antes de tomar una decisión.
¿Qué es una criptomoneda?
En términos generales, una criptomoneda es solo una moneda digital encriptada destinada a ser utilizada como forma de pago. Una moneda es una unidad de valor que opera en su propia cadena de bloques. Independientemente de cualquier otra plataforma. Se puede usar para almacenar valor y pagar servicios, de la misma manera que usarías dinero físico.
Bitcoin (BTC) es fácilmente la moneda de criptomonedas más conocida del mundo, pero está lejos de ser la única moneda disponible. De hecho, en el momento de escribir había un total de 888 monedas en existencia. Puedes ver muchas de estas otras monedas denominadas altcoins, una abreviatura de monedas alternativas, simplemente porque ofrecen una alternativa a bitcoin.
La mayoría de altcoins son una bifurcación de bitcoin y se desarrollaron utilizando el protocolo de fuente abierta de bitcoin. Los ejemplos incluyen Litecoin (LTC), Dogecoin (DOGE) y Namecoin (NMC).
Sin embargo, también hay una larga lista de otras altcoins que no se han derivado del protocolo de Bitcoin y en su lugar han creado su propio blockchain y protocolo. Algunos ejemplos bien conocidos incluyen Ethereum (ETH), Ripple (XRP) y Cardano (ADA).
¿Qué es un token?
Los tokens se utilizan para representar activos digitales que son fungibles y negociables, incluidos desde mercancías hasta derechos de voto. Sin embargo, en lugar de operar en su propia cadena de bloques, los tokens son alojados por otra plataforma, como Ethereum.
Si bien los tokens también son un medio de intercambio, ofrecen una funcionalidad superior al de las criptomonedas. Los tokens brindan a sus titulares la posibilidad de participar en algún tipo de actividad. Por ejemplo, si deseas apostar por el resultado de eventos futuros a través del mercado de predicción descentralizado Augur, deberás usar REP, el token nativo de la plataforma Augur. Los tokens también pueden ofrecer valor a los compradores, por ejemplo, mediante recompras.
Los tokens generalmente se crean y se distribuyen al público en general a través de Ofertas de Monedas Iniciales (ICO). Estas son una forma de crowdfunding. Algunos de los tokens de cripto más conocidos incluyen EOS (EOS), Tron (TRX) y OmiseGo (OMG), siendo Ethereum la plataforma más popular para el desarrollo de tokens.
Sin embargo, también hay muchas otras plataformas sobre las cuales se pueden construir tokens, incluyendo Omni, NEO, Waves y Qtum.