El asesinato de George Floyd, ocurrido hace algunas semanas, suscitó todo tipo de reacciones. Desde el apoyo absoluto de la industria de los videojuegos, hasta las numerosas protestas comprendidas bajo el movimiento Black Lives Matter. Pero, si nos centramos estrictamente en el aspecto tecnológico, se trató del disparador de una nueva clase de aplicaciones populares: las que nos ayudan a difuminar rostros.
Y es que mientras miles de personas se manifestaban en las calles de los Estados Unidos para mostrar su disconformismo por este hecho, en el que recordemos un hombre negro desarmado fue ultimado por un oficial de policía blanco en Minneapolis, estaban floreciendo varias soluciones informáticas interesantes.
Un avance, a partir de una necesidad
Como suele suceder a lo largo de la historia, la aparición de estas apps para difuminar rostros, blurrearlos o desenfocarlos, como también se denomina a tal efecto, no fue casual. Su aparición tan espontánea como inmediata respondía al fundado temor de muchos de estos manifestantes.
Es que, mientras las fuerzas de seguridad de cada estado norteamericana seguían de cerca el movimiento de los autoconvocados a las marchas, distintas organizaciones alertaron acerca de posibles represalias. ¿Qué represalias? Iniciar cargos a los protestantes, que podrían ser fácilmente identificados gracias a las tecnologías de reconocimiento facial que emplean los encargados locales del orden.
Incluso, se especuló con que detrás de estos operativos podría estar la Administración de Control de Drogas, por pedido del Departamento de Justicia. En los Estados Unidos, se trata del organismo que cuenta con herramientas informáticas más avanzadas para la detección de rostros y el entrecruzamiento de datos.
En vistas de este contexto, urgían soluciones como las que rápidamente fueron llegando.
Las aplicaciones para difuminar rostros que ganan terreno
Una de las primeras plataformas que buscó brindar seguridad a los manifestantes fue la creada por Everest Pipkin. Este desarrollador presentó un servicio web que elimina desenfocar caras o taparlas, eliminando además todos sus metadatos. Esto es fundamental para perder cualquier información sobre el lugar o el momento en el que se llevaron a cabo las protestas. Además, así se evita que se revierta ese desenfoque.
El código abierto de esta herramienta puede descargarse desde su propia página web. Es fácil ejecutarlo, y además puedes hacerlo tanto desde tu navegador como cuando estés desconectado de tu red de Internet.
Por supuesto, no se trata del único caso. Otro experto, Sam Loeschen, lanzó censr, una aplicación de realidad aumentada que funciona en las últimas versiones de iPhone. Ésta es capaz de pixelar fotografías en tiempo real, una característica muy importante ante tales circunstancias. Sin embargo, no es abierta como la anterior. Hay que solicitarla y él decide luego a quién la facilita.
«Vi un montón de discursos sobre cómo la policía está agregando vídeos de las protestas de las redes sociales para identificar a los manifestantes», explicó Loeschen para justificar este «proyecto de fin de semana». Pero no importa cuán simple haya resultado para él. Ayudará, tal vez, a salvar vidas.
Otras apps para difuminar rostros
Siguiendo con otros programas que permiten llevar adelante esta acción, tenemos también a Signal. Resulta especialmente significativo que una aplicación de mensajería cifrada de extremo a extremo haya decidido añadir esta prestación. Después de todo, podríamos esperar que llegue también a WhatsApp o Facebook entonces. Para ellos, la jugada fue magnífica. En sólo días ganaron miles de nuevos usuarios.
Moxie Marlinspike, su fundador, comentó a los medios de prensa que la iniciativa tenía por finalidad «apoyar a todos en las calles», agregando que «2020 es un año bastante bueno para cubrirse la cara».
Y nos queda una aplicación final para difuminar rostros. También la última que ha aparecido. Nos referimos a Anonymous Camera. Disponible por ahora únicamente para iOS, se estima que pronto habrá una versión Android. De pago, y con un coste de 2,29 euros, su objetivo es el mismo que el de las otras: desenfocar las caras de las personas. No obstante, va un poco más allá en cuanto a sus opciones de personalización.
En cualquier caso, resulta reconfortante saber que existen propuestas como las aquí listadas. Plataformas tecnológicas pensadas para ampliar nuestras libertades en lugar de acortarlas. Seguramente, siguiendo esta tendencia, en las próximas semanas asistamos a otras tantas apps similares. Bienvenidas sean.