En aquellos viejos y buenos tiempos, era suficiente con disponer de un sitio web para resolver los problemas de la mayoría de nuestros consumidores. Todos utilizaban sus tradicionales ordenadores cuadrados que no podían moverse de la sala de casa. Pero luego llegaron los portátiles y, a día de hoy, los smartphones y tablets acaparan parte del mercado. Por estos motivos, queremos enseñarte algunas de las razones por las que creemos que tu sitio debe ser apto para dispositivos móviles. Y serlo cuanto antes.
Lo primero que tienes que tener en cuenta es que ya no basta con una página web intuitiva y un servidor de calidad. Los clientes son mucho más exigentes que antes, y si todo tu esfuerzo termina allí, los perderás más temprano que tarde. De hecho, esto que estamos diciendo no aplica solamente a portales profesionales. Aunque sólo quieras tener un blog, debes considerar que cientos de personas podrían interesarse en tus contenidos desde sus teléfonos. Si la experiencia de lectura es mala, te abandonarán.
Básicamente lo que buscamos entonces es un diseño responsive. Se denominado de este modo a aquellos que son capaces de adaptarse a la pantalla de los diferentes terminales tecnológicos que usamos a diario.
¿Por qué buscar un diseño responsive?
Hay muchísimos motivos por los que podemos recomendarte que apuestes por un diseño responsive. Después de todo, como comentábamos, parte del éxito de tu página dependerá de que sea un sitio que se ajuste a los dispositivos móviles. Las tendencias y estadísticas internacionales dan cuenta de ello.
Por ejemplo, se calcula que aproximadamente el 60% de los lectores y consumidores en Internet, para 2020, buscarán información a través de sus smartphones. Eso quiere decir que si tu portal únicamente se ve bien en ordenadores, apenas van a leerte tus abuelos o personas mayores. Excepto que ese sea tu nicho principal, y probablemente no lo sea, debes realizar los cambios para llegar a los más jóvenes. Además, todo indica que los adultos mayores también son cada vez más adeptos a los móviles.
Por otro lado, tienes que tener en cuenta que no estamos hablando ni siquiera de dinero. Aunque el diseño responsive es clave para que repuntes tus ventas, sobre todo nos centramos en cuestiones de posicionamiento. Piensa en las páginas que más te gusten, las de esas empresas en las que confías todos los días. Busca su sitio en Internet desde tu móvil. Se ve tan bien como desde el ordenador, ¿verdad?
Y a todo esto tenemos que sumarle que Google, el principal buscador e indexador del mundo, está comenzando a perder la paciencia con las personas que no respetan esta nueva demanda del mercado. Aquellos portales sin diseños responsive lo tienen cada vez más difícil para posicionarse en su buscador.
Un sitio adaptado a dispositivos móviles en la práctica
Tal cual describíamos antes, seguramente tu sitio se ve muy bien en un ordenador con monitor de 15 pulgadas de mínima y resolución Full HD. Pero cuando pasamos a las pantallas de 5,5 o 6 pulgadas de nuestros smartphones, la cosa cambia un poco. Lo normal es que los contenidos se vean recortados, que los bordes queden desprolijos, y que se pierda bastante información esencial de las publicaciones.
Por suerte podemos decir que, a estas alturas de los acontecimientos, casi siempre un desarrollador podrá darte una mano con tu diseño responsive. Algunos empresarios o emprendedores pueden haber escapado durante años a la necesidad de contratar un experto. Sin embargo, se trata de una inversión mínima que realmente vale la pena, y que juzgarás de forma positiva una vez que veas los resultados.
Por esta razón, te vamos a aconsejar que, antes de dar tu sitio web por terminado, eches un vistazo desde todos los dispositivos que tengas a mano. PC de sobremesa, portátil, tablet, smartphone. Cuantos más, mejor. Sólo de este modo estarás seguro de que la experiencia es excelente en cualquiera de ellos.
Ahora que lo sabes, no tienes más excusa como para no apostar por un diseño responsive.