Debemos seguir reglas básicas para una mejor toma de decisiones en los negocios si deseamos que nuestra empresa crezca. No es una tarea fácil estar a cargo de un equipo de trabajo. Pero siguiendo ciertas reglas, manteniendo la mente abierta y escuchando. Es posible pasar de ser un simple jefe, a ser un líder.
Cómo tomar las decisiones correctas y delegar tareas comerciales importantes
En la actualidad tomar decisiones adecuadas para una empresa no es una tarea sencilla. Vivimos una era complicada en donde los cambios son significativos de la noche a la mañana. Sin embargo, si aplicamos estas reglas básicas para una mejor toma de decisiones en los negocios. Podremos salir adelante en poco tiempo.
Estimar el valor monetario
Todos los negocios operan para generar dinero. Por lo tanto, estimar el valor monetario de una decisión para llegar a la conclusión de si es rentable o no es fundamental. El dinero es una medida universal que nos ayudara a darle prioridad a diferentes proyectos y asegurarnos de que hemos tomado la mejor decisión.
Es posible estimar el valor monetario de cualquier cosa, no es algo demasiado complicado. Nos preguntamos ¿Podré generar ganancias de esto? Cuando usamos esta regla no tomaremos ninguna decisión injustificada. Mientras más difícil sea la decisión mejora deberá justificarse.
Valorar el objetivo en medio del proceso
En realidad, la manera de llegar a nuestro objetivo no es realmente lo importante. Lo que realmente importa son los resultados. Incluso si estos resultados se consiguen de forma poco convencional.
Siguiendo este punto, le damos a nuestros empleados la libertad de pensar y ser los más creativos posibles. Si alguien sabe cómo conseguir los mismos objetivos de forma eficiente y rápida, entonces es fundamental prestar atención y comenzar el proceso de cambio.
Lo que debemos tener en cuenta es la importancia del equilibrio. Si deseamos reducir los costos de adquisición de clientes. Podríamos optar por despedir a todo el departamento de ventas. Esto también va a reducir significativamente la tasa de conversión. El problema es que una tasa de conversión más baja terminara por hacer más daño que el costo de adquisición reducido.
En pocas palabras, quizás logremos lo que deseamos. Sin embargo, la empresa no saldrá beneficiada de esto, en absoluto. Así que debemos tener en cuenta esta segunda regla y aplicarla junto a la primera.
Mejor tomar una decisión antes que ninguna
Según un viejo proverbio: moverse es vivir. Por lo tanto, es fundamental que vivas en el trabajo. No sirve de nada sentarte en tu escritorio y quedarte pensando ¿Qué hacer? Puede que tengas alguna clase de bloqueo temporal. En esos casos es fundamental pedir consejos, escuchar razones y volverlo a intentar.
Arriésgate y comete errores
Los errores tanto en el trabajo como en la vida son fundamentales. Gracias a estos aprendemos y mejoramos, ganamos experiencia que nos puede ser útil en el futuro. Incluso en muchas ocasiones puede que uno se termine equivocado y un empleado tenga la razón.
Es en ese mismo momento cuando tienes que estar completamente satisfecho. No únicamente por tener un empleado que es tan competente como tú. Si no que se preocupa y ocupa de su puesto de trabajo.
Sin embargo, los errores pueden beneficiarnos únicamente si nos encargamos de analizarlos a fondo y aprender de los mismos.
Asume la responsabilidad de tu trabajo
Si disponemos de mucha libertad, también lo haremos de mucha responsabilidad. Los empleados pueden llegar a decidir como administrar su tiempo y decisiones. Pero deberán asumir los riesgos o el empleador tendrá que hacerlo. Las dos posiciones son correctas, es una cuestión de preferencias.
Sin embargo, si un empleado comete los mismos errores de forma continua significa que no aprende. Por lo tanto, no nos es útil y deberemos despedirnos. Si no es capaz de alcanzar sus objetivos, también lo será. Si no sigue los principios de la empresa, será despedido.
Básicamente un empleado puede tener más libertad siempre y cuando sea responsable y logre sus objetivos. De esta forma puede obtener un ascenso dependiendo de las ganancias que obtenga para la empresa.
Tomar decisiones con honestidad
La toma de decisiones debe hacerse de manera honesta, compartiéndola con los demás. Especialmente si es una decisión arriesgada. Esto nos ayuda a obtener retroalimentación antes de proceder con dicha decisión, la opinión de los demás nos puede ayudar a ver algo que quizás, no hemos visto y no es lo mejor.
No tengas miedo a cambiar las reglas
Siempre y cuando se obtengan mejores resultados, puedes hacerlo. Las reglas son bastante importantes y nuestros empleados deben seguirlas. Pero no te encierres en esto porque no crecerás, ni como empresa, ni como empleador.
Si seguiste todas las reglas y los resultados no son los esperados. Comparte esto con el equipo, habla profundamente con ellos y cambien las reglas. No importa cuánto, lo único importante es que se vuelvan productivos como un equipo, como uno solo.
Esperamos que este artículo sobre las reglas básicas para una mejor toma de decisiones en los negocios te fuera de utilidad. Recuerda que cualquier pregunta que tengas puedes dejarla en la caja de comentarios que encontrarás un poco más abajo.