- La senadora australiana Jane Hume apoyó las inversiones en estos activos
- La ministra de Servicios Financieros dijo que «es una clase de activos que crecerá en importancia»
- Sobre potenciales bloqueos, como en otros países, dejarán que «la gente tome sus propias decisiones»
Mientras el Bitcoin busca recuperarse del «miércoles negro«, producido entre otras razones por la falsas informaciones sobre nuevas prohibiciones de China a esta divisa virtual, Australia parece haberse transformado en uno de los principales aliados de las criptomonedas. Esto, luego de que, en declaraciones a la prensa, la senadora australiana y ministra de Servicios Financieros Jane Hume le abriera las puertas definitivamente a estas inversiones.
En efecto, la funcionaria mostró su apoyo a estas nuevas monedas digitales. Lo hizo al responder, consultada por las inversiones en criptomonedas, que «es una clase de activos que crecerá en importancia». Además, aseguró que su Gobierno no se entrometerá en las elecciones financieras de los habitantes del país ya que, a su entender, deben dejar que «la gente tome sus propias decisiones», respecto de su dinero.
Estas palabras llegan un contexto sumamente delicado. Esto luego de la estrepitosa caída del Bitcoin y las principales altcoins durante los primeros días de la semana, y especialmente ayer miércoles. Sin embargo, el paulatino respaldo de diversas instituciones ha vuelto a activar la demanda de crypto engines acceso, cotizando el Bitcoin por encima de los 40.000 dólares. Nada mal, si pensamos que hace sólo 24 horas andaba por los 30.000 dólares.
Australia cree que las criptomonedas llegaron para quedarse
Volviendo al discurso de la legisladora Hume. Adquiere especial relevancia teniendo en cuenta que en aquel territorio se está discutiendo profundamente cuál es el enfoque que le da el Gobierno de Morrison a esta nueva ola de plataformas y productos financieros digitales. Ella se desempeña como senadora y ministra de Servicios Financieros. Y está a cargo también del Ministerio de Seguridad Económica de la Mujer.
Tenemos que respaldar a los australianos para que sean lo suficientemente sensibles como para juzgar por sí mismos si deben invertir su dinero duramente ganado en activos de mayor riesgo.
Si bien es frustrante para los profesionales de la inversión observarlo, en algún momento tenemos que dejar que las personas tomen sus propias decisiones … Se trata de responsabilidad personal y sentido común.
Si quieres invertir en dogecoin, no me interpondré en tu camino. La oportunidad personal y la responsabilidad personal son dos caras de la misma moneda.
Eso argumentó Hume acerca del debate en torno a servicios como Tiktok, Facebook, Instagram y Reddit. Redes en las que se pueden hallar constantemente consejos de inversión, que muchas veces no corren por cuenta de expertos.
De igual modo, reconoció que hay información y consejos de inversión erróneos en línea que podrían generar pérdidas para los inversores que los sigan. Pero indicó que hay buenas recomendaciones igualmente.
Libertad, dentro de las leyes australianas
Hay que recodar que la Comisión de Inversiones y Valores de Australia viene advirtiendo hace tiempo acerca del desmedido aumento de contenido no moderado en redes sociales. Generalmente dirigido a novatos en inversiones.
En cualquier caso, esta decisión de Australia sobre las criptomonedas por ahora no define excepciones. Algunos especulaban con que Dogecoin podía quedar por fuera de tales valoraciones. De momento no es así.
No perdió oportunidad de aclarar tampoco que, como cualquier otra clase de activos, están «sujetas a la ley australiana, incluida nuestra conducta de mercado». Eso, a fin de evitar posibles operaciones relacionadas con delitos nacionales o internacionales, que están siendo perseguidos en todo el mundo.
El hecho de que algunas personas tomen malas decisiones no justifica restringir la capacidad de los australianos comunes para participar en las inversiones. Si vemos que algunas personas pierden dinero y lo utilizan para justificar onerosas restricciones sobre la mayor parte de los consumidores australianos, los excluimos de los beneficios del crecimiento del capital que van de la mano con el crecimiento económico
En resumen, una nueva nación que pretende enmarcar las inversiones en criptomonedas. Como la mayoría de las que comparten una historia en común con ella, Australia opta por permitir libremente su adquisición.