Durante las últimas semanas, muchas de las compañías cuyos empleados todavía estaban trabajando desde casa, decidieron que finalmente regresen a sus sedes. En este escenario, algunos lo hicieron felices, y otros preocupados. Cualquiera fuera tu caso, probablemente también seas uno de los millones de trabajadores que aún se están preguntando si es seguro volver a la oficina. Pero, ¿qué deberías saber al respecto?
El caso es que, durante años, el trabajo a distancia siempre ha formado parte de la práctica laboral de los empleados. Sin embargo, los acontecimientos recientes de público conocimiento han acelerado la tendencia del trabajo virtual que ha ido creciendo de manera constante durante décadas. Más de un año de trabajo remoto ha demostrado fehacientemente que estar en la oficina es opcional para muchas personas. Y aún así todo funciona.
¿Cuál es la discusión ahora mismo?
Así como es indiscutible que el coronavirus aceleró el camino hacia la tecnología educativa, en materia laboral parece que las conclusiones no son tan sencillas, en la medida en que se combinan cuestiones como salud, seguridad, flexibilidad y luego, claro, la capacidad real de cada empresa de responder a todas esas demandas.
Hoy por hoy vemos cómo apuestan por modelos de retorno total, híbrido o completamente remoto. Además, no se puede perder de vista que trabajar de casa no es lo mismo para un empleado que para otro. Depende qué hace.
Levantarse más tarde, tener más tiempo de calidad con la familia y evitar esos molestos desplazamientos al trabajo han sido un lado positivo para esta situación de Covid-19 forzada. Así como hay muchos beneficios, estar en casa también tiene sus inconvenientes, como los límites borrosos entre el trabajo y el tiempo familiar.
Pero está la salud mental. Algunas personas trabajan mejor en un entorno grupal, disfrutan de las bromas con sus colegas y participan en clubes de trabajo y actividades fuera de la oficina, pero estrechamente relacionadas con ella. El trabajo era una extensión natural de su estilo de vida, y probablemente se queden sin lo que les ordenaba.
Es decir, la afirmación de que trabajar en una oficina es innecesario y contraproducente es un mensaje contundente y popular. Pero no universal. Esa idea no comprende los deseos de todo el mundo.
Consejos para que la vuelta a la oficina sea un éxito
A nivel colectivo
Estar en la oficina ya no se trata de tener un espacio tranquilo para trabajar. El enfoque ha cambiado para centrarse en las interacciones y colaboraciones cara a cara. Ser completamente remoto permite el enfoque y el tiempo de silencio, pero impide interactuar con las personas mientras te estás preparando otro café en la mañana.
Es posible que sea necesario cambiar los viejos patrones de comportamiento en la oficina y comenzar a tener charlas con el equipo, como grupo, para ver cómo funcionarán sus interacciones actuales cuando algunas personas están a distancia, mientras que otras están en la oficina. Nadie está acostumbrado a esta nueva realidad.
A nivel individual
Volver a la oficina supone, para los individuos, que aparezcan determinados sentimientos de ansiedad, más que nada en aquellos que van a regresar luego de estar mucho tiempo solos en casa, porque además no conviven con alguien.
Debes intentar manejar conscientemente cualquier ansiedad que sientas antes, durante y después de tu regreso a la oficina, y comprender que es normal sentirte un poco nervioso, incluso agobiado, por la rutina vieja y nueva.
Conclusiones
Las empresas, como si de un conjunto indisoluble estuviéramos hablando, atraviesan ciclos y enfrentan diferentes desafíos en el camino, a los que los empleados muchas veces no estamos expuestos del mismo modo.
Como se trata de cambiar la cultura de trabajo para que sea más flexible, pero también de administrar esos retos y constantes cambios, llevará años para eliminar los procesos y prácticas arraigados en la mayoría de los países. Afortunadamente, ya han pasado dos años de absolutas modificaciones.
Nosotros creemos que el resultado logrará un equilibrio entre felicidad de los empleados y resultados comerciales. Pero si todavía no te beneficias de ello, sigue pidiendo a tu empresa un trabajo flexible que te permita llevar un mejor estilo de vida. Y siempre ten en cuenta que el negocio también debe tener éxito.
En resumen, volver a la oficina no será exactamente volver. Implicará otras cosas, y tal vez sea sólo el comienzo de una despedida de los formatos de trabajo de toda la vida. Eso lo dirá el tiempo, cada empresa… y cada empleado.