- Si tienes dinero ahorrado, y eres un fanático de los juegos en línea, probablemente te preguntes qué conviene más, si comprar un ordenador cuya potencia puedes ir escalando, o una consola
- Déjanos decirte que, si te decantas por una computadora, tendrás que pensar muy bien si quieres un ordenador de escritorio, perfecto para ir actualizándolo, o un portátil, ideal para tener tus juegos contigo
Vivimos en la era de lo gaming, en la que varios de los mismos dispositivos que usamos para trabajar o comunicarnos tienen versiones adaptadas, que han sido especialmente pensadas para disfrutar de los videojuegos más exigentes. Esto se ve en móviles, pero también en ordenadores, y por eso muchos usuarios amantes de los juegos de última generación se preguntan si deben comprar un portátil gaming ahora mismo. ¿De qué depende la respuesta?
Pues bien, la contestación a esta pregunta debe abordar muchas aristas, las cuales iremos desarrollando a lo largo del presente artículo, como para que puedas concluir tú mismo si necesitas comprarte una laptop gaming o no. Todo esto, claro, considerando siempre que hablamos de marcas y modelos complejos, para nada económicos.
Si a eso le sumamos el auge de los juegos en la nube y plataformas como Steam Deck o Xbox Gaming Cloud, tiene más sentido que nunca evaluar poseer una computadora que podamos llevar a todas partes y divertirnos.
La portabilidad es magnífica, pero también muy cara
En cualquier caso, resulta evidente que estamos entrando en la era de la portabilidad en materia de videojuegos. Dentro un par de años, veremos a los jóvenes y no tan jóvenes entretenidos con juegos que antes únicamente hubieran podido ser ejecutados en PCs de escritorio, trasladando sus partidas consigo.
En líneas generales, el PC promedio puede desbloquear una experiencia de juego imposible en PS o Xbox Series. Además de eso, un portátil le agrega la ventaja de poder mover los títulos a donde sea que estés desplazándote. Asimismo, no perdemos ninguna de las ventajas en lo que refiere a usos para el trabajo o el estudio.
Desafortunadamente, la mala noticia es que cualquier ordenador diseñado para juegos, tiene costes de fabricación altísimos, que incluso se han elevado como consecuencia del confinamiento y la situación geopolítica actual. Eventualmente, vamos a tener que pagar en torno a los 1.500 dólares o euros para tener uno.
Dicho esto, creemos que el económico no puede ser el factor diferencial porque tampoco una computadora clásica vale mucho menos dinero. Y además tendrás que busca soluciones alternativas si estás fuera, que cuestan dinero.
Por poner un ejemplo de lo que decimos, puedes asegurarte una CPU a la altura de las circunstancias y barata, con un hardware extraordinario. Pero no lo aprovecharás del todo hasta que no compres un monitor para videojuegos.
Las limitaciones están allí, sobre todo en autonomía
Las computadoras portátiles para juegos modernos son sorprendentemente poderosas, y pueden ejecutar juegos AAA sin problemas. Se espera una duración aceptable de la batería, de unas cinco horas, en cualquier máquina. Significa esto que no hay una relación real entre su capacidad de ejecución y su autonomía, en definitiva.
Al ser tan compactas, es imposible que integren baterías de mayor tamaño, ya que eso las haría grandes y pesadas. Pero para no sufrir con esto, tendremos que prácticamente condenarnos a usarlas siempre cerca de un enchufe.
A este hándicap hay que añadirle, posteriormente, que un ordenador portátil no puede ir renovándose poco a poco. Compramos una notebook, y solemos deshacernos de ella con los mismos componentes internos tras varios años. Mientras los juegos se vuelven cada vez más exigentes, la capacidad de ejecutarlos será cada vez menor.
Los juegos en la nube, una opción fenomenal pero inmadura
Indudablemente, uno de los motivos para comprar un laptop gaming son los cloud games, con servicios clave como los que hemos mencionado en párrafos anteriores, junto a Google Stadia, NVIDIA GeForce Now y otros más.
Ahora, los juegos en la nube tienen algunos inconvenientes obvios, como que hará falta una conexión veloz, estable. Tendrás que pedir la contraseña del WiFi local, y eso puede exponer los contenidos de tu equipo, así que cuidado.
Nuestro consejo es que primero pruebes rigurosamente cada uno de estos servicios y, cuando estén probados, y te sientas satisfechos con ellos, te lances a comprar un portátil gaming. El orden inverso puede ser una mala idea.
Entonces, ¿debería comprar un portátil para juegos?
Por supuesto que la intención de este texto no tiene nada que ver con ser aguafiestas, sino con dejar en claro que, por el momento, la respuesta a la pregunta del título es que no, que no deberías comprarte un portátil gaming. Siempre que estés en duda acerca de la conveniencia de hacerlo, eso significa que éstas no son para ti.
Podemos afirmarlo porque son tan específicos los requerimientos que satisface, que de tener estas necesidades ya habrás adquirido un dispositivo con estas características, mientras que si no las tienes, no vale la pena la inversión.
Al menos a mediados de 2022, pensamos que para el grueso de los usuarios sigue siendo preferible un PC gaming acompañado de un portátil o por qué no una consola, ya que las desventajas que tiene todavía esta clase de laptops no se han solucionado, y podría haber avances importantes en muy pocos años en cuestiones fundamentales, como por caso la batería/autonomía, el principal punto flojo con el que lidiamos actualmente.
¿Piensas comprar un portátil gaming en el corto plazo, o crees que es mejor esperar un poco más?