- Más allá de antivirus y otras soluciones que son obvias, puedes adoptar una VPN por seguridad
- Las redes privadas virtuales tienen una enorme capacidad de evadir tácticas de espionaje
- Saber cómo funciona una VPN y de qué forma pueden ayudarnos es indispensable
Las VPN se han popularizado en los últimos años no sólo como una herramienta para estar a salvo de los sistemas que rastrean nuestra actividad en línea sino también para evitar las restricciones geográficas de ciertos contenidos. Evidentemente, muchos usamos redes privadas virtuales a diario por dichas razones, pero hay otros motivos que deberíamos considerar. Por ejemplo, ¿cómo puede una VPN proteger a los usuarios del espionaje externo?
Esta duda, que podría parecer poco importante, es sin embargo fundamental cuando nos enteramos de que un 90% de los internautas en los Estados Unidos ha visto su PC infectado en los últimos años con algún software espía. Lamentablemente, la gran mayoría de ellos no tienen ni idea de cómo deshacerse de estos intrusos.
Es decir, estamos en presencia de un problema real, que nos obliga a preguntarnos qué programas pueden proteger efectivamente nuestro ordenador de las amenazas externas. Y la respuesta es que una red privada virtual será indudablemente una opción que debes considerar, especialmente por su relación costo/beneficio.
¿Cómo funciona una VPN y por qué podría ser útil?
Antes de analizar el potencial de ciberseguridad de las redes privadas virtuales hay que comprender cómo funcionan. Sabemos, en general, que estos programas cifras nuestra actividad en línea, impidiendo que las plataformas que están allí para recolectar datos de lo que hacemos sepan dónde navegamos, qué descargamos, etc.
Esto significa que los anunciantes no conocerán cuáles son nuestras preferencias, lo que si bien puede repercutir en ver publicidad que no esté relacionada con nuestros intereses, asimismo nos asegura de que nadie le dará un uso incorrecto a nuestra información privada. Pero lo más relevante es que tampoco los piratas informáticos tendrán suficientes datos como para sacar conclusiones sobre qué hacemos, y eso nos mantiene mucho más seguros.
Capacidades y limitaciones de las VPN
Hemos visto que una VPN pueden proteger del espionaje a un equipo informático pero, al igual que otros programas, no todas estas redes privadas virtuales son iguales. Y eso nos obliga a prestar un poco más de atención.
Lo mínimo que deberíamos exigirle a una VPN para confiar en ella es que no registre nuestra actividad en línea, que no afecte negativamente la velocidad a la que navegamos en casa, que cuente con diversos servidores mundiales, que sea compatible con todos los sistemas operativos, y que ofrezca Atención al cliente 24/7.
Aclarado esto, es mejor prescindir de las redes privadas virtuales gratuitas, porque no están a la altura.
Por otro lado, las políticas de cada aplicación tipo VPN la definen, y hay algunas que advierten que están obligadas por su propia naturaleza a compartir los datos con las autoridades gubernamentales. Es mejor huir de ellas.
Además, hay que recordar que éstos no son antivirus, por lo que no pueden reemplazarlos y pensar que van a sustituirlos porque brindan algunas características de protección es un error que no podemos cometer.
En resumen, una VPN puede proteger del espionaje pero debemos ser conscientes de sus limitaciones.
¿Cómo usar una VPN para protegernos del espionaje?
Creemos que ya ha quedado claro, pero por si acaso lo repetimos, las redes privadas virtuales no son imbatibles. Pueden protegernos en línea de piratas informáticos, ataques DDoS y puntos de acceso WiFi falsos. Tristemente, es poco lo que pueden hacer contra amenazas como el malware o el phishing.
Lo atractivo es que podemos mejorar su performance como herramientas de seguridad siguiendo estos trucos:
- No te conectes a servidores sobrecargados: no sólo vas a tener una peor experiencia de navegación, sino que pueden existir puntos ciegos desde los cuales comiencen a filtrarse usuarios con las peores intenciones.
- Escoge las redes privadas virtuales con tunelización dividida: esta característica consiste en encriptar todo tráfico que provenga de aplicaciones muy específicas, mientras se libera aquella información menos sensible.
- Nunca descargues archivos que parezcan sospechosos o de procedencia incomprobable: de más está decir que no debes crear peligros donde no los haya, y para eso hay que dejar pasar los elementos inciertos.
¿Has adoptado una VPN como parte de tu planificación de seguridad en tu hogar o empresa?