- Al navegar, podemos toparnos con mensajes de advertencia que indican que nuestra privacidad está en riesgo, y que hay una alta probabilidad de que alguien ajeno pueda leer la información
- «Su conexión no es privada. Los atacantes podrían estar tratando de robar su información» es solamente uno de los diferentes mensajes similares que nos avisan que estamos en peligro
- ¿Por qué aparecen estas leyendas y cómo evitarlas sin cometer un error de seguridad?
Cuando estamos navegando en Internet y algo sale mal, inmediatamente aparecerá uno de esos mensajes que están predeterminados específicamente por los navegadores, para señalarnos que parte del proceso ha fallado. Entre ellos podemos mencionar por ejemplo la advertencia de «Conexión no privada», que es una de las más frecuentes. Pero qué nos está indicando y qué debemos hacer entonces para deshacernos del aviso y seguir con nuestras cosas.
Lo primero que debemos aclarar en este sentido es que muchas veces el mensaje en cuestión puede acompañarse de algunos detalles adicionales, pero en cualquier caso siempre las consideraciones a hacer son las mismas.
Su conexión no es privada. Los atacantes podrían estar tratando de robar su información
El anterior es uno de los mensajes más habituales dentro de este espectro de advertencia y, como verás, es posible que el navegador te dé la posibilidad de seguir la navegación de todos modos, si eso es lo que deseas.
¿Por qué soy redirigido a esta página?
Como ya sabes, hoy en día realizamos más actividades en línea que nunca antes, desde comprar productos online hasta pagar las facturas de los servicios que consumimos regularmente, y eso significa que confiamos en estas plataformas y que las mismas son capaces de garantizar que nuestros datos permanecerán seguros.
Si bien no solemos enterarnos de esa parte del proceso, cada vez que nos conectamos a Internet para navegar, ese navegador que usamos verifica la existencia de algún certificado digital, como TLS o SSL, que son los que nos dan seguridad respecto de que los datos no serán compartidos con nadie externo, y que están cifrados y encriptados.
Resumidamente, puedes saber si un portal es seguro si en su URL antes dice HTTPS y no HTTP, como en el pasado. Por centrarnos en Chrome, que es el navegador más popular, desde hace años Google ha trabajado para que ese elemento concreto le permita saber a los internautas si están en un entorno del que pueden fiarse… o no.
Todas las páginas web que no cumplen con TLS o SSL serán marcadas con el mensaje «Conexión no privada». Mayormente, los demás navegadores han adoptado medidas semejantes para proteger a los internautas.
¿Me robarán mi información si procedo de todos modos?
Dado que visitar sitios que no tienen el cifrado adecuado puede ponerte en riesgo de sufrir alguna ciberamenaza, debemos concluir que si procedes de todos modos efectivamente hay una probabilidad de ser atacado. Profesionales en la materia afirman que eso pasa especialmente cuando interceptan nuestro WiFi.
La buena noticia es que te hemos enseñado cómo detectar intrusos en tu red WiFi, así que puedes poner en práctica esos consejos para mantener un poco más a salvo de estas amenazas y los ciberdelincuentes, que nunca faltan.
Si eres un fanático del comercio electrónico y la posibilidad de adquirir todo tipo de artículos desde casa, debes ser consciente de que las intercepciones de operaciones para el robo de tarjetas de crédito alcanzaron cifras récord durante el pasado año 2021, y todos los pronósticos suponen que seguirán creciendo en el futuro.
Por otro lado, la advertencia de Conexión no privada además podría alertarte sobre un ataque de phishing. Cuando hablamos de éstos, nos referimos a aquellos en los que alguien se hace pasar por un portal confiable, aguardando pacientemente a que el usuario comparta información, para hacer un mal uso de ella.
¿Qué debo hacer cuando encuentro una advertencia como ésta?
Bruce Schneier, experto en seguridad y asociado de la facultad de Harvard, nos recomienda primero que nada que nos aseguremos de que estamos intentando conectarnos a la dirección URL correcta y que no hay ningún error.
Posteriormente, el especialista dice que todo se resume al juicio que el propio internauta pueda tener. Conocimientos, experiencia y hasta intuición son fundamentales para determinar qué se debería hacer.
De hecho, el profesional reconoce que más de una vez vamos a recibir esa advertencia sin que haya peligro real. Claro que el problema es que somos nosotros los que asumimos el riesgo, y por eso lo mejor es ser precavidos.
Asimismo hay situaciones más sensibles, como el estar conectado a una red WiFi pública, más susceptibles a estos ataques externos, y en las cuales sí tienes que asegurarte de conectarte solamente a las páginas con HTTPS.
Paradójicamente, y ya para finalizar, el propio Schneier recuerda que si bien un certificado verificado confirma que un portal está encriptado, aún puede ser malicioso de otras formas si sus propietarios tienen malas intenciones.