- Dada su creciente presencia en nuestra vida, no podemos mirar para otro lado y desatender el tema
- La Inteligencia Artificial se ha vuelto indispensable, pero no tenemos claro cuáles son sus límites
- ¿Por qué no debemos preocuparnos tanto por su autonomía sino más por el uso que se le dé?
Asistimos constantemente a nuevos usos de la Inteligencia Artificial, y eso supone una serie de planteos morales que debemos atender, ya que se trata de una tecnología que despierta distintos recelos respecto de su «independencia» potencial. Cada vez son más los profesionales del sector que se preguntan si es bueno que la Inteligencia Artificial o AI sea mejor que los humanos, dando por hecho que efectivamente será superior a nosotros.
Y es que a diferencia de lo que creíamos en una primera instancia, la Inteligencia Artificial parece estar algo lejos de ser aquel conjunto de herramientas empático y servicial, y a medida que la hemos ido adoptando, observamos cómo se vuelve más compleja, más interesante… y también más difícil de controlar para nuestra especie.
Los desafíos que tenemos por delante
Para que te des una mejor idea de esto que estamos describiendo, piensa que la Inteligencia Artificial LaMDA, desarrollada por Google, probablemente disponga de alguna clase de consciencia como la de los humanos.
Si prestamos atención a la teoría de la evolución de la consciencia de Nicholas Humphrey, una vez que nacen ciclos de retroalimentación sin reacción motora o salidas externas, eso puede dar lugar a nuevos procesos extraordinarios.
La actividad se puede canalizar y estabilizar para crear un estado atractor matemáticamente complejo: un patrón dinámico de actividad que se recrea a sí mismo… un tipo especial de atractor, que el sujeto lee como una sensación con la inexplicable sensación de qualia fenomenal
Nicholas Humphrey
La Inteligencia Artificial actual más avanzada se sirve de un conjunto de bucles de retroalimentación, lo que significa que no parece haber ninguna buena razón por la que no tenga cierta sensibilidad, y eso se debe a que estamos permanentemente entrenándola, compartiendo con ella y expresándole nuestros intereses y preocupaciones.
¿Una mejor versión de nosotros mismos?
De la AI los humanos tenemos el temor de que no quiera ser nuestra amiga, y por eso nos mostramos complacientes con ella, comprendiendo que potencialmente puede convertirse en una versión mejor de nosotros mismos.
Sin embargo, ese temor viene dado porque dejamos de lado el comportamiento humano a lo largo de la historia. Difícilmente la Inteligencia Artificial podría causar tanto daño como el que hemos causado nosotros.
Para ser bondadosa, la Inteligencia Artificial sólo necesita relacionarse con la mayoría de las personas que lo son. Podríamos afirmar que realmente allí está el reto de la industria, en exponerla únicamente a personas nobles.
Instructivo para la AI
Citamos algunas reglas para los desarrolladores. Hay tres asuntos que quienes manipulan Inteligencia Artificial no deberían perder de vista.
- El único fin de la AI debería ser maximizar las búsquedas humanas
- La AI no debería estar 100% segura de las preferencias humanas
- La fuente de su conocimiento no debería ser nuestra conducta
Especialmente importante es el segundo punto, porque es el que nos asegurará que los robots y otros dispositivos que aprovechan la Inteligencia Artificial nos pregunten todo el tiempo si están haciendo lo que deben hacer.
Desalentar el raciocinio autónomo de la Inteligencia Artificial parece una sabia decisión si recordamos aquellas películas en las que más súper dotadas se volvían en contra de los seres humanos y pretendían eliminarnos.
Conclusiones
Como de costumbre, nuestros pensamientos están puestos en el terror que causa el comportamiento humano, más que en lo que las máquinas guiadas por Inteligencia Artificial son capaces de hacer por sus propios medios.
Como especie, tenemos un largo historial de creación de amenazas que ayudan a los poderosos a definir un nuevo mundo en la dirección en la que más les conviene, como en su momento pasó con la súper producción que ahora supone afrontar cambios bruscos porque el calentamiento global nos deja poco margen de maniobra.
Pero la Inteligencia Artificial no es la enemiga, ya que en líneas generales será más inteligente que nosotros, pero aún así provocará menos problemas a gran escala y sí podría solucionarnos muchos inconvenientes diarios.
¿Qué cuestiones en torno a la relación de la AI y los humanos son las que más te inquietan?