A estas alturas parece que se está convirtiendo en una especie de telenovela que cambia día tras día. PlayStation (Sony) hizo todo lo posible por intentar bloquear la compra de Activisión Blizzard por parte de Microsoft. Sin embargo, todo parece indicar que esta jugada les puede salir bastante mal. Dicha estrategia parece que llamo la atención de algunos congresistas importantes de Estados Unidos.
Sin embargo, la autoridad encargada de regular esta clase de “situaciones” en el Reino Unido está a favor de que se lleve a cabo la adquisición y aseguran que, incluso, sería algo muy positivo para la industria en términos generales. Incluso desde Xbox, piensan que PlayStation sería capaz de crear su propio Call of Duty en 10 años, lo cual sería más positivo para la industria y los jugadores.
Sony podría estar en problemas debido a su estrategia para bloquear la compra de Activision por parte de Microsoft
PlayStation no quiere que Microsoft se haga con Activision Blizzard y es comprensible, después de todo, estamos hablando de una compañía que cuenta con algunas de las franquicias más rentables de la historia de los videojuegos.
Si bien, el foco se centra bastante en Call of Duty, específicamente, no podemos evitar pensar en otras franquicias como Overwatch o Diablo. Sony entiende que se trata de poderosas propuestas en el mundo del videojuego y que esta adquisición podría romper el equilibrio entre ambas empresas.
Pero por lo que podemos ver gracias a la revelación del reconocido periodista Stephen Totilo en Axios, aunque sea 11 miembros del Congreso de Estados Unidos presionaron a la Administración de Biden para que tome medidas contra Sony y sus interferencias.
¿Por qué se le volvería la situación en contra a Sony?
El intento de Sony de bloquear la compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft, encendió las alarmas en los congresistas. Estos tienen una enorme preocupación por todo lo que hizo y sigue haciendo Sony contra Microsoft y sus esfuerzos de mejorar su presencia en el mercado japonés. Totilo se hizo con un par de cartas que fueron enviadas al staff del presidente de EE. UU. En donde se solicita que se haga algo al respecto sobre una “supuesta” discriminación de los productos norteamericanos en Japón.
En estas cartas podemos ver algunos tópicos bastante interesantes que son, justamente, lo que le jugaría en contra a Sony. Especialmente cuando se habla de que el 98% de la cuota de mercado que mantiene Sony en cuanto a las consolas de última generación y alto rendimiento. Evidentemente, dejando de lado los dispositivos móviles y Nintendo Switch por su potencia de hardware.
También se puede ver que PlayStation (Sony) logro llegar a un acuerdo con otras compañías (editaras de videojuegos) para obligarlas o tentarlas, dependiendo de la situación, para que no lancen los juegos en la consola de Microsoft.
Los representantes políticos comprenden que esto es una clara violación al acuerdo comercial entre Japón y Estados Unidos llevado a cabo en 2019. En dicho acuerdo, Japón se comprometía a no discriminar de ninguna manera cualquier producto estadounidense en su país.
En la otra carta, firmada por el congresista de Washington, expone sus preocupaciones sobre lo negativo que es para la competencia, incluso en EE. UU., como también para el futuro de todos los trabajos en la industria de los videojuegos en el país. La idea es sencilla, mantener un dominio fuerte en el mercado japonés, obteniendo un nivel de ingresos considerables. Esto les puede ayudar a obtener una ventaja considerable, y conseguir mejores resultados fuera de sus fronteras.