No podemos negar que PlayStation 5 ha tenido un éxito enorme en el mercado, arrollando a su competencia directa Xbox. Tanto la consola, como su servicio añadido PS Plus, generan una buena cantidad de dinero para la compañía, algo que no están dispuestos a arriesgar. Es justamente por eso, que Sony no piensa incluir sus juegos triple A en PS Plus. Por lo menos no desde el día de lanzamiento.
Esto es algo que hace diferente a Xbox Game Pass. Microsoft está dándolo todo para que su servicio se mantenga como dominante en este mercado y lo está logrando con creces. Si los reguladores aprueban la compra de Activision Blizzard, estaríamos hablando de otro “Plus” que ganaría la plataforma de Microsoft.
Los de Redmond lanzan sus juegos triple A sin ninguna clase de inconveniente desde el día uno en Xbox Game Pass, que por un precio muy reducido nos permite acceder no solo a los últimos lanzamientos, también a cientos de juegos que se encuentran disponibles en su biblioteca.
Pero Sony no está pensando en la base de usuarios que puede crear invirtiendo en este servicio. Lo que le interesa es el dinero ahora mismo y sus exclusivos triple A no aparecerán en PS Plus, por lo menos no de lanzamiento. Esto es algo que nunca hicieron y que, incluso ahora, no lo harán. La idea aquí es muy simple: es necesario vender más copias de juegos para generar la mayor cantidad de ingresos posible.
Sony no quiere incluir los juegos triple A de lanzamiento en PS Plus
No es lo mismo lanzar un juego triple A tan esperado como The Last of Us Part III y esperar a vender millones de copias de 60-70 dólares, que “regalarlo” en un servicio de suscripción que no cuesta ni el 20% de ese valor. Es algo similar a lo que está ocurriendo con las plataformas de streaming como Netflix y Disney Plus.
Y evidentemente esto es un enorme beneficio para la compañía, que no quiere dejar de lado todos esos millones de dólares que recibe gracias a la venta de sus títulos exclusivos. Sin embargo, tampoco es algo muy positivo que digamos para nosotros, los jugadores.
Microsoft piensa completamente diferente, por ahora
Por el otro lado, nos encontramos con Microsoft, una compañía que no parece tener muchos inconvenientes en renunciar al dinero “extra” que podrían generar las ventas individuales de sus triple A para ampliar el catálogo de Xbox Game Pass. El cual, ciertamente, es muy conveniente para ahorrar dinero. Especialmente para aquellas personas que tienen la posibilidad de adquirir un juego mensual o uno cada dos o tres meses.
Para Microsoft, esto se traduce en ofrecer un servicio mucho más atractivo, repleto de opciones de primera calidad y reforzar el ecosistema de Xbox. Adicionalmente, se intenta recortar esa enorme ventaja que tiene Sony en este mundo con respecto a la consola de Microsoft.
No obstante, la pregunta que no podemos evitar hacernos sería ¿Y cuándo esa brecha se acorte? ¿Microsoft seguirá siendo tan “bondadoso” con sus títulos? Sony tiene una base sólida de usuarios que no los abandonara y por algo lidera el mercado. Prefiere vender sus juegos por un precio que, honestamente, duele pagar para generar más ingresos económicos. Entendible desde el punto de vista de empresa, doloroso desde el punto de vista de nuestro sueldo.