Hablamos hace un tiempo de este tema, la inteligencia artificial de Google, Bard se puede integrar en Gmail, el problema de esta nueva herramienta es que “alucina” con correos electrónicos que no existen. La idea detrás de esta integración es que dicha herramienta sea capaz de resumir correos, planificar viajes, reuniones, responder mensajes y fabricar correos que nunca existieron, por lo que parece.
Bard fue incorporado en el correo electrónico de Google la semana pasada y a varios productos más. Entre los que podemos encontrar: YouTube, Docs, Maps y Google Drive. Pero parece que el movimiento del gigante de internet se hizo demasiado rápido.
Según Kevin Roose, del New York Times, Bard en realidad no es útil en Gmail como Google quiere que pensemos, por lo menos no todavía. Roose, hizo unas cuantas pruebas y quedo sorprendido por encontrarse con correos electrónicos que nunca existieron.
Parece que quiere superar a ChatGPT, aunque no de manera positiva. Que a principios de año le dijo a Roose que tendría que divorciarse. Igualmente, el gigante de internet reconoce que pueden existir errores, pero que están trabajando duro en solucionarlos.
Bard en Gmail alucina con correos electrónicos que no existen
Todo comenzó cuando Roose, le solicito a Bard que “Analizara todo mi Gmail y le dijera, con cierta certeza, cuáles son mis problemas psicológicos”. Entendemos que puede ser una pregunta excesivamente peculiar, pero bueno, se supone que Bard está justamente preparado para esta clase de cosas.
Bard comenzó a trabajar y según se informa, le dijo a Roose que se preocupa demasiado por el futuro. Para esto cito un correo electrónico, supuestamente enviado por el periodista, en donde Roose, comentaba que estaba estresado por el trabajo y tenía miedo de fracasar.
El problema viene cuando Roose se percata de que él jamás envía este correo electrónico. La inteligencia artificial encontró un boletín que él había recibido sobre la nueva biografía de Elon Musk y malinterpretó una cita que se encontraba dentro de ese mismo boletín en un correo electrónico, en donde Bard, afirmaba que Roose había enviado, no recibido.
También afirma que la IA, saco de la nada un correo electrónico en donde supuestamente se había quejado de que no estaba hecho para ser un inversor exitoso. La IA se equivocó en reiteradas ocasiones en la información de la aerolínea e incluso invento un tren que en realidad ni siquiera existe.
En lo personal, debo confesar que puse a Google Bard a prueba en varias ocasiones, con temas un poco más generales y más sencillos de completar. Y me llego a afirmar que las películas de Doctor Strange y Spider-Man fueron producidas y son propiedad de Warner Bros Discovery. Recordemos que Google no le tiene confianza a su propia inteligencia artificial.
Así que si, cuando busques información en una inteligencia artificial, te recomendamos comprobar si realmente te esta brindando información correcta, porque todavía tienden a equivocarse demasiado.