Intel ha lanzado hoy su segunda generación de procesador de la familia Intel Core, Sandy Bridge, que prometen un mejor rendimiento al estar basados en una microarquitectura de 32nm. Todos ellos siguen haciendo uso de las populares marcas Core i3, Core i5 y Core i7, pero el mismo chip cuenta con una CPU, un controlador de memoria y un procesador gráfico, y por supuesto, un nuevo socket llamado LGA1155, por lo que no son compatibles con las placas base que soportaban los procesadores Intel Core de la primera generación.
Los procesadores Sandy Bridge vienen en dos sabores diferentes, por una parte los que contarán con una GPU Intel Graphics HD 2000, y los que vendrán ligados a una GPU Intel Graphics HD 3000. Serán de dos o cuatro núcleos, además de un núcleo gráfico; con Advanced Vector Extensions (AVX), hasta 8MB de memoria caché L3; Hyper-Threading, Clear Video Technology HD, InTru 3-D para ver imagen en 3D; y el acelerador de codificación Quick Sync Video. Pero también vienen armados con Turbo Boost 2.0, una aplicación nueva y mejorada de la tecnología de escalamiento de Intel que proporciona al chip un mayor overclocking automático.
A continuación se muestran los 29 modelos de la segunda generación, de los cuales 15 son móviles y 14 de escritorio. Los que cuentan con la letra «K» al final, significa que vienen con un multiplicador desbloqueado, permitiendo así un overlocking más alto.
