Hace aproximadamente un año, el Banco Central de España invitó a varios socios a probar una novedosa moneda digital emitida por el banco central (CBDC). Ahora, tras un proceso de selección, ha elegido a sus asociados para este proyecto.
El pasado miércoles 3 de enero, el Banco Central de España anunció su colaboración con Cecabank, Abanca y Adhara Blockchain, destacándose entre 24 candidatos para pruebas de las CBDC. Estos socios, dos de ellos bancos prominentes y el tercero un jugador clave en blockchain en el Reino Unido, son esenciales para llevar a cabo las pruebas del CBDC.
Durante los próximos seis meses, se realizarán pruebas piloto que simularán transacciones interbancarias usando un único activo CBDC tokenizado y varios emitidos por distintos bancos centrales. Una parte del experimento se enfocará en el uso de la CBDC para la liquidación de un simulado bono tokenizado, una iniciativa del consorcio Cecabank-Abanca.
Lo que hace especial al programa CBDC de España es su independencia del proyecto cripto euro, que tendría un alcance más amplio abarcando toda la eurozona. Este enfoque nacional podría servir como un modelo valioso para futuras implementaciones en la región.
En paralelo, el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital de España está adelantando la implementación de la regulación de criptoactivos de la UE. A pesar de estos avances, una reciente encuesta reveló que solo un 20% de los ciudadanos españoles está interesado en usar el euro digital, sin embargo, sobre un 60% tienen criptomonedas y sin planes de venderlas.
El interés en los CBDC no se limita a España. Rusia, por ejemplo, está avanzando en las pruebas de su rublo digital con la participación de 16 bancos. Estos proyectos globales indican un creciente interés de los bancos centrales en explorar las monedas digitales como una alternativa moderna a las monedas tradicionales.
¿Qué son las CBDC?
Las monedas digitales de los Bancos Centrales (CBDC) son tokens virtuales emitidos por los mismos Bancos Centrales que emiten dinero fiduciario. A diferencia de las criptomonedas, las CBDC están vinculadas a la moneda local, similar a cómo las stablecoins se vinculan al dólar.
Aunque puede parecer redundante tener CBDC si ya existe dinero tradicional, y al margen de un mayor control sobre el dinero, su propósito no es actuar como una nueva criptomoneda, sino ofrecer una solución financiera para aquellos marginados del sistema financiero tradicional. Esto incluye a personas sin acceso a cuentas de ahorro, créditos, préstamos o seguros.
Las CBDC, al facilitar la inclusión financiera, también podrían reducir significativamente los costos operativos de los bancos, lo que se espera que se traduzca en tarifas más accesibles para el público.
La aparición de las CBDC responde a varios factores, entre ellos, el deseo de algunas naciones de reducir su dependencia del dólar estadounidense. Eventos recientes como la pandemia y la Guerra de Ucrania han evidenciado cómo algunas monedas, como el dólar, pueden beneficiarse en situaciones globales críticas.
En este contexto, el Banco Central Europeo, entre otros, está considerando seriamente crear su propia criptomoneda. Al tener versiones digitales de sus monedas, los países podrían disminuir su necesidad de acumular reservas en dólares y, por ende, su dependencia de esta moneda.
Imagen destacada: Teresa Hernández – generada con IA