A pesar de que como es lógico solemos quedarnos con los múltiples beneficios que estas tecnologías reportan, últimamente no son pocos los expertos que dicen que la automatización deshumanizará el marketing. Probablemente tengan algo de razón pero, ¿en qué se basan y qué tan probable es que eso pase?
En principio, puede que te hayas planteado la forma en que la automatización puede deshumanizar el marketing hasta un punto en el que, como consumidores, acabemos rechazando los intentos de conquista de las marcas.
¿Qué dicen tus bandejas de entrada? ¡Échales un vistazo ahora!
Basta que le eches un vistazo a las bandejas de entrada de tu cuenta de Gmail, LinkedIn y demás plataformas para comprobar que ni siquiera estás interesado en muchos de los productos y servicios que han tratado de venderte. Estas avalanchas de SPAM infundado, que no tiene ningún sentido, se ven como invasiones desesperadas.
¿Alcanza eso para afirmar que la automatización está deshumanizado el marketing? No, pero sí para asegurar que algunos humanos encargados de la automatización del marketing no están haciendo las cosas como deben.
Al final, el propósito del marketing siempre ha sido crear interés en los productos y servicios en un público objetivo. Realmente deberían apuntar sólo a aquellas audiencias que se tomarán ventaja de lo que se les está vendiendo. Cuando una marca decide enviar SPAM con mensajes a diestra y siniestra, sin prestar atención a lo que hace, lamentablemente acabamos recibiendo un sinfín de comunicaciones que descartamos sin llegar a abrir.
Esta falta de empatía y matices es el motivo por el que el marketing parece impersonal y genérico hoy en día. ¡Simplemente lo es! La buena noticia es que esto puede evitarse. La mala es que hace falta tiempo y dinero.
¿Puede la personalización salvar el marketing automatizado?
Durante años, los especialistas han estado promocionando la combinación de automatización y personalización. Argumentaban que era la clave para el éxito del marketing. El problema es que esa personalización se ha perdido.
Saber el nombre y la dirección de correo electrónico de un potencial cliente no es suficiente para estar molestando. Eso no da derecho ni a enviar SPAM ni a llamar por teléfono. La personalización sólo funciona si se agrega valor. Cuando no se añade absolutamente nada, da igual cuántas veces intenten comunicarse. No habrá conversión.
Hay tácticas que resultan, como un descuento del 25% para ese carrito de compras que dejamos abandonados. Evidentemente esto no es lo más común, y la mayoría de los mensajes se quedan en insistir en que compremos productos o contratemos servicios tratándonos como si recién estuviéramos llenando el carrito. Descontextualizar consciente o inconscientemente a los usuarios es uno de los peores errores que se cometen en el marketing.
Escalar la automatización del marketing y hacer frente a los principales inconvenientes de estos procesos puede requerir de un poco más de tiempo. Las marcas están pendientes de las últimas tecnologías y han abandonado seguramente a los clientes, pero hay varias soluciones para las problemáticas de automatización de marketing.
Conclusiones
La automatización del marketing fue una tecnología creada para ahorrar tiempo perdido las tareas más duras: recopilar datos, enviar correos electrónicos masivos, etc. Pero ha terminado reemplazando a los seres humanos. Aunque esta sustitución sea inevitable, la personalización puede ser el salvataje del marketing automatizado.
La gente siente que a las marcas no les importa porque suelen recibir mensajes automatizados e impersonales. Justamente por eso se ve en la personalización de los mensajes y las estrategias de marketing la posible solución.
¿Eres de la idea de que la automatización deshumaniza el marketing? ¿Cómo podría ayudar la personalización?