Desde 1976, el mundo de las consolas portátiles se ha revolucionado año tras año, pero esto podría llegar a su fin según las opiniones de John Carmack, el padre de los míticos juegos Doom y Quake, que cree que la Nintendo 3DS y la Sony NGP podrían ser la última generación de consolas portátiles debido a que los desarrolladores de juegos ahora pueden representar gráficos avanzados en los teléfonos móviles inteligentes (smartphone) muy parecidos a los que pueden ofrecer para las consolas portátiles.
«No siempre puedes construir pirámides sólo porque lo desees… y el teléfono móvil inteligente puede llegar a ser el 80 por ciento tan bueno para los juegos como una plataforma dedicada únicamente para juegos. […] Si se trata de un dispositivo de un 80 por ciento de juego, ¿cuántas personas en el mercado de los juegos estará satisfecho con eso? Esa es la pregunta que está en la mente de todos, y yo realmente no lo sé.»
Sin embargo, Bob McKenzie, Vice Presidente de GameStop, tiene una perspectiva diferente, y piensa que los juegos en los smartphone o tables son diversiones ocasionales generalmente de cinco minutos. Por el contrario, la NGP está orientada a los jugadores extremos gracias a su impresionante rendimiento.