Fidelity Digital Assets, división de inversión que administra 5,8 billones de dólares, ha mencionado una tendencia para 2025: los activos del mundo real tokenizados (RWA) en Solana. Estos activos, que conectan las finanzas tradicionales (TradFi) con la descentralización, están ganando terreno por su capacidad de simplificar procesos financieros y reducir costos operativos.
Según Fidelity, la adopción de esta tecnología está apenas en su etapa inicial, ofreciendo una ventana de oportunidad para aquellos que aún no han entrado en el mercado de las criptomonedas.
La tokenización de RWA ofrece una solución directa a varios inconvenientes que enfrentan los sistemas financieros convencionales. Los largos tiempos de espera y las altas tarifas de intermediación suelen excluir a muchas personas de los beneficios del comercio global. Con RWA en cadena, estas barreras se diluyen, permitiendo a usuarios de cualquier lugar acceder a mercados competitivos sin intermediarios y con total autonomía.
Fidelity estima que el valor de estos activos tokenizados podría duplicarse en el próximo año, partiendo de los 14 mil millones actuales.
Este optimismo es compartido por otros referentes en finanzas tradicionales, como Larry Fink, quien describe la tokenización como una evolución natural en los mercados de valores.
Para ello, la cadena de bloques de Solana cuenta con una infraestructura ideal para el desarrollo de mercados tokenizados. Su capacidad de procesar transacciones de forma rápida y económica la convierte en una red atractiva para proyectos innovadores como Remora Markets, que pretenden facilitar la negociación de activos como acciones corporativas los 365 días del año.
Solana permite eficiencia operativa y abre la puerta a la democratización de los mercados financieros, haciendo posible que cualquier persona participe en este tipo de operaciones.
Raj Gokal, cofundador de Solana, refuerza esta visión. Durante la Multicoin Summit, dijo que iniciativas como DePIN y agentes de inteligencia artificial podrían complementar el crecimiento de los RWA en Solana, sentando las bases para un año de importantes avances.