Ultra Review y Guía Práctica Placa Base GIGABYTE GA-Z68X-UD4-B3 Rev1.0 al detalle. Premio Características islaBit

29. GIGABYTE GA-Z68X-UD4-B3. Ventajas e Inconvenientes. Conclusión

Ventajas del GIGABYTE GA-Z68X-UD4-B3

  • Notable presentación del embalaje, con multitud de características a la vista. Aunque solo se usa el idioma inglés en general, se mencionan y muestras sus características más importantes, conociendo de antemano el producto sin necesidad de abrirlo.
  • Kit de accesorios justo para un producto de gama media. Tendremos una conectividad media garantizada, aunque la placa base ofrece muchas más conexiones que de cables adjuntos, bastantes más que del doble.
  • Fabricación excelente. Todas las piezas electrónicas están perfectamente ensambladas, y eso se nota.
  • Excelente conectividad de la placa base, con la última tecnología puntera en interfaz de transferencia de datos. Lo tiene prácticamente todo. Conectores SATA3.0 ( con varias configuraciones RAID), USB2.0 de sobra (hasta 8+6 dispositivos) y 2+1 USB3.0 (para 4 dispositivos más), además de un conector combo eSATA/USB trasero con la tecnología On/Off Change de Gigabyte.
  • Notable sistema de refrigeración pasiva. Silencio absoluto de la placa base, con especial mención de los disipadores que bordean al socket y el que cubre el chipset.
  • Panel trasero muy completo, en el que no echaremos prácticamente nada en falta. Tendremos eSATA, USB 3.0, LAN RJ-45 y audio. Lo único mencionable es que no dispones de puertos para video, ya que no da soporte a la iGPU integrada en los procesadores de Intel.
  • Ahorro de energía considerable junto con elevado rendimiento. Combinando varias tecnología aportadas por Gigabyte junto con su destacable funcionalidad del software Dinamic Energy Saver 2 y EasyTune6; tendremos una combinación excelente, en bajo consumo y elevado rendimiento cuando sea necesario.
  • Excelente OC. Podemos configurar en la CMOS BIOS Utility, además del software adjunto Touch BIOS, un montón de parámetros para ajustar correctamente nuestro OC, alcanzando más del 42% de rendimiento en el procesador y comportándose correctamente en los 2133MHz en la DDR3.
  • Interfaz Touch BIOS con tecnología táctil bajo Windows. Tenemos al alcance un programa mucho más agradable de manejar que las convencionales BIOS de 16bits. Además de con el teclado, se podrá manejar con el ratón y con pantalla táctil para facilitar su configuración. Esta es una de las novedades aportadas por Gigabyte que nos ha gustado, aunque faltan pulir ciertas cosas.
  • Compatibilidad con la tecnología X.M.P. «Extreme Memory Profile» de la memoria RAM, para una configuración más rápida bajo la CMOS.
  • Total compatibilidad con CrossfireX de ATI y SLI de Nvidia a 8x por 2.
  • Buen equilibrio entre las ranuras PCIe de 1x (2) y PCI (2).
  • Notable refrigeración activa. Incluye 4 conectores FAN, 1 de ellos con tecnología PWM, con control por sofrware.
  • Notable listado de programas de software compatibles de Gigabyte. Nos ha encantado el abanico de posibilidades que nos abren con el programa Smart 6 de Gigabyte, con detalles que más de uno agradecerá, como el control de horarios o el poder guardar contraseñas en la ROM dual de 16MB.
  • Futura completa compatibilidad con PCIe 3.0, únicamente actualizando la BIOS.
  • Buen soporte técnico. Podemos encontrar los drivers y software necesario en las páginas web dedicadas de Gigabyte y tienen buen rendimiento de descarga, experimentando cierta mejora en este aspecto en la actualidad.
  • Notable Garantía del fabricante de 3 años, ampliable a 4 años (1 año más) a petición del usuario adquisidor del producto. Aunque este dato inicial no se muestra en su embalaje.
  • Precio ajustado y entendemos que irá a la baja. Esta placa base de gama media es totalmente actual, siendo muy completa en muchos aspectos, por lo que su precio de 149€ con impuestos incluidos está bastante justificado.

Inconvenientes del GIGABYTE GA-Z68X-UD4-B3

  • Cuelgues por overclock, sobre todo usando el software que sirve para ello bajo Windows. Esto siempre existirá en cualquier placa base, sea del fabricante que sea, y no por ello significa que dicha plataforma sea mala. Aconsejamos en este caso hacer OC siempre bajo la CMOS de la BIOS, precisamente por eso, aunque tampoco nos libramos de los cuelgues. Si lo realizamos correctamente dentro de los límites de cada dispositivo hardware, no tiene por qué colgarse el sistema. Desgraciadamente esto no depende únicamente de la placa base, sino de los dispositivos conectados.
  • Inestabilidad del software Touch BIOS en uno de sus apartados, concretamente el que sirve para modificar voltajes. Esto inhabilita cualquier posibilidad de overclock mediano o alto bajo este programa. Quizá le falte una vuelta de tuerca más a este programa (esta utilidad es muy reciente). No obstante, no tenemos conocimientos de que ocurra lo mismo con otras placas base con este chipset Z68 de Intel.
  • La mayoría del software incluido por Gigabyte únicamente está inglés. No estaría de más que los fabricantes en general usaran más los idiomas del globo terráqueo más importantes en el software que implementan.
  • Intel no ha estado muy acertado dejando a un lado la posibilidad de detectar automáticamente las características de la memoria RAM, ya que el controlador lo posee el procesador y el chipset también es de ellos, centrándose en soluciones tales como la iGPU integrada en el procesador y configurable bajo el software Virtu de LucidLogic, que dicho sea de paso no es compatible con este modelo concreto de placa base. Por tanto, seremos los usuarios los que deberemos configurar la DRAM correctamente de forma manual. Este especie de inconveniente se arrastra a cualquier placa base de la marca que sea con chipset Z68 Express de Intel.

Conclusión

Placa Base GIGABYTE GA-Z68X-UD4-B3

Jamás hemos sido tan meticulosos realizando una análisis de este tipo a una placa base de Gigabyte. Prácticamente este hardware que aquí os mostramos al detalle, le hemos hecho de todo a lo largo de más de 2 semanas pausadas de pruebas. Y poco podemos añadir que no hayamos detallado ya. Nos hemos centrado en el comportamiento del hardware, y la relación de éste con el software que facilita y adjunta Gigabyte, a través de programas y utilidades que aumentan su funcionalidad, entre otras cosas.

La Gigabyte GA-Z68X-UD4-B3 prácticamente tiene de todo. Resulta una placa base de gama media con una conectividad por encima de lo normal, ya que posee gran número de conectores para USB y SATA. No obstante, tan solo dispone de 6 de los 7 posibles slots PCI/PCIe que puede ofrecer una placa base de formato ATX y tampoco dispone de conectores en el panel trasero destinados a conectar una pantalla de imagen, así que no da soporte directo a la iGPU integrada de los procesadores Intel compatibles.

Su aspecto es muy elegante, su ensamble muy preciso y de calidad. Como detalle de perfección, no hemos encontrado ningún condensador sólido torcido ¿es eso posible? Nos podemos encontrar con los problemas de montaje típicos, tales como estorbar el disipador de grandes dimensiones para refrigerar la CPU con el disipador de la memoria RAM de elevada altura, debido a la cercanía de los slots de memoria con el socket, o no poder configurar como nos gustaría el interior de algunas semitorres, por tener los puertos sata en forma de «L» y la configuración de las mismas. Como siempre, una ventaja a veces trae inconvenientes que no son culpa precisamente o únicamente de la placa base.

Incompatibilidades de montaje puntuales a parte, comunes a muchas placas base, Gigabyte aporta un software muy acertado para este modelo. Los programas tales como EasyTune 6, Dinamic Energy Saver 2, Smart 6 o la propia TouchBIOS, son utilidades dignas de la mayor alabanza. Aun así no se libran de algunas críticas, como la implementación de mayores idiomas o mejora en la fluidez en la TouchBIOS, interfaz bastante reciente, por cierto. Seguimos prefiriendo usar la CMOS de la BIOS Award en el arranque, ¿nostalgia tal vez?

Otro de los aspectos que cabría mejorar es el apartado de los conectores FAN y la posibilidad de tener control total e independiente de los mismos. Una placa base de gama media capaz de soportar grandes tasas de overclock debería tener la capacidad de soportar un sistema de regulación de las RPM controlables directamente por el usuario. Esto es algo básico que demandan los usuarios entusiastas del overclock, que además nos ahorraría el tener que adquirir un rehobus frontal destinado para tal fin.

Por último, cabe destacar, la capacidad del ahorro energético, el elevado rendimiento y elevada estabilidad que ha demostrado esta placa base bajo la mayoría de nuestras pruebas. Por todo ello, esta placa base se lleva nuestra máxima recomendación por su excelente funcionamiento; será una «madre» bien vista por todos «sus allegados», que seguro que se portarán muy bien con ella, ya que a parte de su amplia conectividad, su estabilidad queda más que demostrada, sea el dispositivo que sea el conectado a ella. Su garantía ampliable a 4 años, su futuro soporte para tarjetas gráficas PCIe 3.0 únicamente cambiando la BIOS y su larga durabilidad gracias a la tecnología Ultra Durable 3 de Gigabyte y su Dual BIOS (con doble chip físico implementado), hacen el resto para convertirse en una placa base completa y de alta calidad a un precio muy competitivo. En islaBit, no podemos dejarla sin ofrecerle uno de nuestros mejores premios, merecido de sobra, nuestro Premio Características islaBit. Por último, si hemos decidido realizar un exhaustivo análisis a este modelo en concreto, por algo será… ¿Nos habrá gustado? Seguro que sí.


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