Una polémica noticia ha salido a la luz, y es que una empresa dedicada a la computación y la fabricación de ordenadores y componentes para estos con sede en China, está a punto de caer en bancarrota, y como última movida ha intentado salvarse jugando su última carta bajo la manga, una jugosa y peligrosa demanda a Apple.
Y es que todo comienza con que la empresa Proview es la dueña del nombre o la marca «iPad» en China, aunque en vísperas del lanzamiento de la popular tableta, Apple procedió a comprarle el nombre en el año 2009 por unos 50.000 dólares, el detalle está en que esta empresa se quedó con los derechos en China y no en el resto del mundo, pero esto podría ser sumamente peligroso para los de Cupertino.
Pues un tribunal de Shangai procederá a decidir el día de mañana si la petición de Proview sobre suspender la venta del iPad en el país se llevará a cabo o no, mientras negocian un acuerdo. Pero lo que más preocupa no es el hecho de que deje de ser prohibida en China, sino de que esto también podría prohibir las exportaciones de la tableta demandada desde el país, por lo que no habrían nuevas tabletas Apple en todo el mundo, algo crítico para la empresa.
El día e mañana se conocerá el desenlace de este litigio, y esta es quizás una de las situaciones más delicadas en las que se ha visto envuelta Apple en los últimos años, donde se debate el futuro de sus dispositivos. La imagen que acompaña a este artículo es la del «iPad» desarrollada por Proview hace casi diez años, un ordenador de sobremesa llamado «Internet Personal Access Device«.