Hace ya poco más de un año nació la actual consola portátil de la gigante nipona de los vídeojuegos, Nintendo, llamada 3DS y con la espectacular característica de contar con una pantalla que reproduce imágenes estereoscópicas sin necesidad de gafas especiales, sin embargo, la empresa tuvo que reducir drásticamente su precio (de 250 dólares a 169 dólares) ya que esta sencillamente no vendía lo suficiente.
Fue una buena movida, porque se dispararon las ventas, pero desde ese entonces, Nintendo perdía por cada 3DS vendida, hoy se ha acabado esto. Y es que según anuncia la empresa dirigida por Satoru Iwata, la 3DS deja de venderse en un precio por debajo de su coste de fabricación desde el día de hoy, y aseguran que esta portátil ha mejorado notablemente su rentabilidad.
Esto es una gran noticia para la compañía ya que nunca en su historia habían tenido que vender por debajo del precio de producción y perder con las ventas de un producto, cosa que Sony hizo con el PS3 en sus inicios, por mencionar un ejemplo. Pero en este último trimestre ha mejorado, y en sus resultados financieros anuncian que se vendieron casi dos millones de 3DS y desde hoy ya no perderán más con cada consola.