La medicina es una de las tantas ciencias que se nutre del avance de la tecnología, y en las últimas horas ha sorprendido la información acerca del desarrollo de una especie de pinzas que utilizan las ondas de sonido para mover las células, lo que haría que los trasplantes de éstas a través de bio-impresiones en tres dimensiones sean más sencillos, haciendo viable la ubicación de tejidos especialmente diseñados dentro del cuerpo humano.
En efecto, el nuevo desarrollo se lo debemos a los expertos de los centros Carnegie Mellon, el MIT y la Universidad Estatal de Pensilvania que trabajaron en conjunto para poder generar una especie de pinzas, gracias a las cuales será posible moverse alrededor de las células individuales, sin provocarles a éstas ningún tipo de daños, ya que se sirven del sonido, y no llegan nunca a tocarlas físicamente.
Aunque este tipo de pinzas a través de las ondas de sonido vienen siendo investigadas desde hace algún tiempo, no podemos perder de vista tampoco que recién ahora se está analizando la chance de comenzar a servirse de ellas en entornos específicos como la medicina cuando hablamos de trasplantes utilizando impresiones en 3D de diferentes órganos y tejidos, un tipo de innovación que, esperemos, resulte positiva.