A pesar de un catálogo inicial algo parco en diversidad, con solo un gran título que llevarse a casa, la nueva videoconsola de Nintendo está funcionando mejor de lo esperado en las tiendas. Y tanto, que Nintendo espera que la consola supere los 20 millones de unidades vendidas en todo el mundo solo en 2017.
La centenaria compañía, con sede en Kioto, ha avisado a sus proveedores de componentes para que dupliquen la producción según la prensa local taiwanesa. El presidente de Nintendo, Kimishima Tatsumi es aún más optimista y anunció que esperan “superar los 110 millones de unidades vendidas” a lo largo de los años.
En España, Nintendo Switch superó las 44.000 unidades vendidas en sus primeros días, convirtiéndose en el mejor lanzamiento de una consola en el país. Un récord que lo ponía por delante de dos históricas llegadas a los escaparates como la Sony PlayStation 2 o la Wii, también de Nintendo.
En el país natal de Nintendo, donde el entusiasmo por la consola era desorbitado, la cifra superó los 330.000 unidades. El público japonés no estaba solo, y el éxito del lanzamiento fue también mundial superando a la Wii, la consola más popular de Nintendo para el hogar, con más de 100 millones de unidades vendidas desde su lanzamiento en 2006.
Varios de los juegos que despertaron más interés durante su presentación en enero no llegarán al mercado hasta dentro de unos meses, lo que está creando una demanda por la Switch que permanece escondida. Super Mario Odyssey, Mario Kart 8 Deluxe, Fire Emblem, Xenoblade Chronicles 2 y por último, un título de Pokémon aún por anunciar.
Nintendo espera convencer con estos juegos a todos los aficionados que de momento han optado por retrasar su compra. Si los planes de la compañía kiotense se cumplen, tienen “otra Wii” en sus manos.
La Switch se convertiría pues, en una máquina de imprimir dinero que acabaría con su valle de lágrimas de los últimos años en los que la Wii U ha conseguido unas ventas paupérrimas quedándose en poco más de 13 millones de unidades vendidas desde 2012.
Mientras tanto, la competencia no se queda quieta. Sony, sus vecinos al norte y acérrimo rival en el mercado de videojuegos mundial desde hace dos décadas, están luchando a dos bandas rebajando la PlayStation 4 de precio cada pocos meses y con una PlayStation 4 Pro, con mucha más potencia y calidad gráfica, que atrae al público más exigente.
Microsoft, a su vez, planea el lanzamiento del denominado Project Scorpio que promete “la consola más potente jamás creada”. Los estadounidenses quieren unificar en gran medida sus dos grandes plataformas, Windows y Xbox, para facilitar el desarrollo de juegos simultáneamente para ambas plataformas.
Una cosa queda clara, y es que el éxito de Nintendo Switch dejará marca en la industria, haciendo que grandes estudios y otros fabricantes se planteen nuevas estrategias. Para el gran público esto significa más cantidad y variedad de juegos, algo que siempre es de agradecer.